[REC]

El proyecto de [REC] nació a raíz de hacer algo pequeño. Jaume Balagueró tenía pensado hacer La Dama Número Trece (que estrenaría como Musa en 2017) y Paco Plaza trabajaba con distintas ideas.

Rabia 6, REC, REC 70, 70 minutos, Length 70, Time 70, Duración: 70 minutos y Bombers (utilizado en la claqueta del rodaje) fueron algunos de los títulos provisionales del proyecto.

El film se rodó íntegramente en el edificio ubicado en Rambla de Catalunya, en Barcelona. Javier Alvariño se lo enseñó a Paco Plaza aprovechando el rodaje de otra película, Chuecatown.

El destino de [REC] era incierto. Según los directores, no sabían si la película iba a ser lanzada directamente en vídeo, estrenada en cines o bien regalada con el periódico de turno.

A la hora de elegir un nombre para la protagonista, el guionista Luis Berdejo prometió que la protagonista se llamaría igual que la próxima persona que les llamara por teléfono. La elegida fue Ángela Vidal, una neuróloga amiga de Leticia Dolera y de Paco Plaza. En el Festival de Sitges de 2007, la joven se reunió con los directores.

Para promocionar el film, la empresa Nokia y la productora Filmax unieron fuerzas y surgieron virales como La habitación, El tercer ojo y episodios del programa ficticio Mientras Usted Duerme. Varios de ellos se incluyeron en el modelo N-95. También hubo un concurso francés en el que los usuarios tuvieron que grabar con su móvil su propio cortometraje de terror. El ganador fue Les Ongles, de Clément Deneux.

[REC] no tiene música. La única melodía que se escucha es Vudú, del artista Carlos Ann.

El teléfono móvil con el que Jennifer graba lo sucedido es un Nokia N-93, el mismo que usaron los directores para grabar su propio Making of.

El programa Aquí hay Tomate -en concreto un reportaje de Raquel Mosquera en un centro hospitalario-, el episodio de Expediente X X-Cops y el cortometraje Rubber Johnny de Chris Cunnigham sirvieron de inspiración a los directores a la hora de abordar el lenguaje televisivo de [REC].

La foto de comunión de la joven Tristana Medeiros es la foto de comunión de Paula Balagueró, la sobrina de Jaume.

La introducción del film se rodó en el ya desaparecido Parque de Bomberos Eixample/Central, en Barcelona. Los bomberos que aparecen no son actores, ejercen realmente la profesión. Cuando Ángela nos habla acerca del descanso de los bomberos, éstos dormían de verdad en sus camas. El hombre que aparece de repente no es un figurante.

Mientras se rodaban las entrevistas a los bomberos, la filmación tenía que parar debido a las salida de emergencia que se ejecutaban de manera imprevisible.

La conserje del parque de bomberos que escapa de la visión de la cámara está interpretada por Ana Prats, amiga personal de Paco Plaza.

Al caer el muñeco dummy que simulaba la caída de Álex (David Vert), y aprovechando un giro de cámara, el actor, que estaba escondido, tenía que ocultar el susodicho muñeco y colocarse en la misma posición. Todo ello en cuestión de segundos.

La película se rodó de manera cronológica.

Los actores Manuel Bronchud, Ferran Terraza y Carlos Lasarte ya habían trabajado junto a Jaume Balagueró en su primera película: Los Sin Nombre.

Una de las voces del exterior que hablan por megáfono es la de Jaume Balagueró. Si el espectador afina el oído, puede escuchar frases como Código J.A. (en referencia a J.A. Bayona, director de El Orfanato y amigo personal) o ¡Recomendadla! (una manera sutil de hacer publicidad al propio film).

Paco Plaza quería que el niño japonés (Daniel Trinh) llevara una camiseta del Fútbol Club Valencia. Jaume Balagueró, por el contrario, deseaba una vestimenta del Barça. Por motivos de la localización de la historia, Jaume se salió con la suya.

Durante el rodaje, Jaume Balagueró observó como María Teresa Ortega (la actriz que interpreta a la señora mayor) limpiaba insistentemente la escalera manchada durante la producción. El director le señaló que no se preocupara. A raíz de esta divertida anécdota, el personaje puede verse barriendo durante la entrevista a Jennifer.

La secuencia de la enfermería, cuando los infectados se rebelan, se tuvo que rodar de nuevo, al no gustar la primera versión editada.

En un principio, Guillem -ya infectado- escupía sangre al romper el cristal en la escena de su transformación. La idea se desechó.

De manera curiosa, cuando el agente de sanidad está explicando el accidente con el perro Max, su actor –Ben Temple– y Sergio (Jorge Yamam Serrano) se llevan la mano a la nariz de manera simultánea.

A la hora de dar color al sonido de los infectados, Oriol Tarragó se ayudó de ruidos de diversos animales, e incluso personalizó a cada uno ayudándose del carácter del personaje. Es más: colocó por accidente el sonido de una cabra durante el montaje de la película y se escucha en el montaje final, cuando Manu y Sergio van a por Jennifer y descubren que el cadáver de la señora Izquierdo ha desaparecido.

Cuando la cámara, tratada como un personaje más, se llena de sangre debido al altercado con Jennifer, la película cambia de rumbo completamente y el nivel de violencia alcanza altos niveles.

Los directores deseaban que el sudor fuera un elemento importante. En cierto punto, y para conseguir rápidamente tal efecto, se habló de que los actores que interpretaban a los infectados pusieran sus cabezas dentro de un cubo de agua. Pero debido a las características del maquillaje no pudo ser.

Cuando los supervivientes tratan de escapar de Mari Carmen (María Lanau), esposada, ésta consigue alzarse a la barandilla. En una toma no utilizada, salta al otro lado de la escalera de un salto.

A la hora de dar orientación a los actores cuyos personajes se habían infectado, los directores pedían algo absolutamente imprescindible: brutalidad extrema. Algo que Ana Isabel Velásquez (la colombiana) se tomó muy en serio en su ataque hacia Ángela (Manuela Velasco). Se rompió la ventana del rellano y las dos actrices casi caen al vacío.

La lucha de Manu (Ferran Terraza) con la japonesa infectada (Akemi Goto) fue acelerada en post-producción.

La escena en la que Pablo y Ángela buscan las llaves del ático fue real: Manuela Velasco no sabía en qué lugar se encontraban. El momento en el que la actriz golpeó accidentalmente la cámara con la cabeza se aprovechó en el montaje final.

Cuando Ángela Vidal se queda sola en el ático y coge la cámara, la grabación de lo acontecido pertenece a la propia Manuela Velasco, sin ningún tipo de modificación.

Durante la escena del ático, los directores colocaron diversas fuentes de olor bastante desagradables para conseguir crear la atmósfera necesaria para la escena.

Una de las ideas originales era que cuando Pablo muere a manos de Medeiros, el audio dejara de funcionar y la película se quedara muda hasta el final.

El actor Ariel Casas fue una de las opciones de los directores para el casting. Al no estar disponible, los directores le volvieron a llamar para la secuela, donde interpretó a Larra. Su nombre aparece en los créditos finales, como agradecimiento.

Para bautizar al monstruo final, los realizadores se inspiraron en el cantante latinoamericano Glenn Medeiros, autor de hits como Nada cambiará mi amor por ti.

Gran parte del guión se acabó en el propio edificio donde se rodó. La idea de una autoescuela en los bajos fue cambiada por la de la fábrica textil.

Jesús Pérez, ex jefe de post-producción de Filmax, pone la voz al policía del megáfono que habla a los vecinos desde el exterior.

La cámara utilizada en el film fue una Panasonic P2 200 con un soporte Fig Rig.

En un principio, el escenario original era una comisaría.

Caracterizar a Javier Botet como Tristana Medeiros tomaba alrededor de diez horas: ocho para aplicarle el maquillaje y dos para quitárselo.

La secuencia de la entrevista a los vecinos no estaba en el guión original. Se improvisó sobre la marcha.

El presupuesto fue de unos 1,5 millones de euros. Recaudó 8.194.065 euros.

Manuela Velasco nunca supo el final real de la película.

Se situó entre las cien películas de 2007 más taquilleras fuera de EEUU con más de 33 millones de dólares.

64.000 espectadores en su primer fin de semana en Hong Kong.

Una de las ideas abandonadas era que la película fuera protagonizada por Mercedes Milá.

La película se rodó entre el 23 de octubre y el 12 de noviembre de 2006. El teaser trailer que vendería la película se haría el «día cero»: el 19 de octubre.

En un principio, el monstruo del ático era el mismo cura que buscó solución para el virus (o sea, Albelda). Javier Botet fue contratado como su intérprete, pero Balagueró y Plaza idearon el personaje de Tristana Medeiros y la historia cambió. Botet pasó de ser un cura a ser una niña infectada, y por ende, a convertirse en uno de los iconos del cine de terror contemporáneo.

Vicente Gil (el policía adulto) y Carlos Vicente (Guillem) prestaron sus voces al doblaje español del remake, Quarantine. Estaba previsto que Javier Botet volviera a interpretar a Medeiros, pero no fue posible debido a la demora de los permisos necesarios para trabajar en el extranjero.

Consecuencias del éxito de la película: Quarantine, Quarantine 2: Terminal, [REC] 2, [REC] 3: Génesis, [REC] 4: Apocalipsis, el comic [REC] 0: Historias Inéditas, la novela [REC]: Los Relatos Perdidos e infinidad de parodias y homenajes.

por José Mellinas

Klaatu Barada Niktó

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