Slender Man

Pese a todos los esfuerzos realizados por Sony para promocionar su película, hemos de decir, y con total contundencia, que Slender Man no ha funcionado. La adaptación cinematográfica, que no la primera pero sí la de mayor presupuesto, no ha funcionado en ningún aspecto, siendo el producto final una auténtica decepción, por no decir la más grande de lo que va de año.

Sylvain White, el responsable de tal patraña, es el director de series como MacGyver, Arma Letal, Hora punta, y también es padre de la ridícula tercera parte de Sé lo que Hicisteis el Último Verano . Convertir en una pobre película el conocido creepypasta, las actuales leyendas urbanas que se hacen virales a través de internet, presenta un problema al ser ésta una historia que en origen es muy pobre. Llevar estos breves relatos al cine es un trabajo complejo, puesto que es cierto que contienen elementos potentes, pero hay que sacarles mucho jugo para construir buenos argumentos. Genial fue el trabajo de la primera temporada de Channel Zero con la leyenda de Candle Cove, ejemplo de como un cuento de terror corto se puede transformar en un guión sustancioso para una temporada de seis capítulos. Es verdad que la historia de Slender Man no tiene demasiada fuerza, es bastante floja. El hombre del saco millennial al fin y al cabo, pero un buen guionista hubiese ahondado en su origen, en el por qué de su existencia, como se hizo con Sadako / Samara en Ringu / The Ring. En otras manos, el film hubiera tenido otro ritmo y por ende, uno bastante mejor.

Otro de los problemas que nos podemos encontrar es que estamos ya saturados de tramas de terror en las que se introduce las nuevas tecnologías como los nuevos psychokillers de los actuales adolescentes, estando éstos amenazados por una multiplicidad de peligros: que si vídeos malditos, portales de Internet malignos, la propia Dark Web… Han pasado pocos años y ya estamos realmente hartos de este tipo de argumentos poco elaborados, por lo que esta película nace ya con una historia muy manida y que hemos visto en numerosas ocasiones en los últimos años. 

Otro pormenor que nos encontramos en Slender Man es que es una película que no aporta absolutamente nada nuevo, ningún elemento sorpresivo, nada que no se haya visto ya. Estamos ante una amalgama de clichés del cine de terror moderno, cosas que ya están más que vistas y que nos puede traer a la mente películas que se hayan visto antes. Si se junta eso con la aportación de una atmósfera soporífera y un tedioso uso del ritmo y del tiempo, que nos hace perdernos en la trama sin saber muy bien como escaparnos, que hace que la figura de Slender Man quede totalmente difuminada y pierda así el protagonismo que en teoría debería de tener. Esta cinta se ahoga en su propio argumento pesado, que se hace más absurdo conforme van pasando los minutos.

Entonces, ¿por qué no ha funcionado Slender Man? Muy sencillo: una historia que no aporta nada, que no está elaborada, que se deja llevar por clichés que han funcionado en películas que ya hemos visto anteriores, y que el resultado es un producto de 90 minutos que navega a la deriva desde el primer momento a través de un argumento muy aburrido.

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